Es tan pequeño un paso al borde del cruel abismo, que mi alma plasma en pincel óleos de bifrontismo. Peco de civismo, cambio la piel y miento si te digo que hoy me siento bien conmigo mismo. Es el mecanismo cuando me levanto flojo, la técnica, que en épocas de llanto usé... debilidad: no aguanto ver tus sollozos pues ningún daño me dolió tanto como el que causé... y sé, que el uno es el único número cuando estás solo y con una bebida añeja me casé pues me vi olvidado y fuera de cualquier recuerdo como una caja con cintas viejas de cassette. Alguien dijo: \"cuenta tus problemas que te ayudará\",
pero es mentira sin salida que escoger. Hacerlo me llevó hasta el punto de partida, sólo aunar viejas heridas que el tiempo logró esconder. Por eso hoy no consigo salir de la cama y sé que fuera no me espera nada para aliviar esta llaga. Añoro el tiempo que contigo suturaba, pero en falso, mientras vuelvo a andar descalzo en la fría calzada. Mi rechazada especie en vías de extinción, prisión que hace que arrecie el viento de la sien al corazón. No hay relación que no deprecie lo que en soledad se aprende.
Hoy sólo quiero serle infiel a la razón.
-Lumier.
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